Rule 29-10-11

Muy wapo el rule de este fin de semana, fue corto pero intenso y dio para un montón de coñitas y anécdotas que hicieron más llevadera la mañana del sábado. La hora zulú fue la habitual, las 10 de la mañana en la Alameda de Pobra do Caramiñal.

A medida que iban llegando los 9 bikers que se congregaron ese día, las anécdotas iban surgiendo, Pas con una hinchazón en la cara que posteriormente evolucionó a paperas, Brei descubriéndonos su nuevo método para entrenar sin tener que aguantar a ningún otro biker, Varela con sus guantes de calor extremo y el mundo al revés cuando Aki llegó a la hora de Edu y Edu a la de Aki...

A pesar de llevar a dos sherpas consagrados en el grupeto como el Maestro Breider y Edu, este último tomó las riendas de la marcha sin apenas oposición, pero sólo en teoría, ya que el movimiento indignado está calando en el grupeto y los perroflautas de Portela Mtb no le tienen respecto ni al presi, por lo que no se le hizo ni puñetero caso a ninguna de sus indicaciones, hecho este que consiguió irritar levemente a Edu, algo realmente asombroso dada la dificultad para conseguir que pierda los papeles (ironic mode: on).

El recorrido de la rutilla fue bastante clásico, subida a la Portela, ascensión al Monte Barbanza por los eólicos, conexión con la carretera de bajada de Iroite por los Chans (con pinchazo de la Yeti incluido...), subida por Castelo de Vitres, bajada por la Portela y Ponte das Taras (salvo Edu que fue por libre por la zona del Campo de fútbol de San Isidro...) para estar sobre la 1:30 en el Bar de San Isidro.

En el Bar de San Isidro, mientras degustábamos las riquísimas tapillas de empanada y gambas con las que nos obsequiaron, la cosa se desmadró, en primer lugar pudiendo comprobar la certeza de la frase de que del amor al odio hay un paso, quedando patente en la relación de Aki y Brei y por otra parte con una discusión acalorada entre Edu y el Maestro en la que este último dudaba de la capacidad de Edu para conseguir finalizar la Bierzo 151. Tras unos minutos de tensión en los que cada uno expuso con exquisita elegancia sus argumentos, se llegó a un acuerdo por ambas partes al afirmar que el que ni de coña la terminaría sería Fran, afirmación que sería refrendada por unanimidad por el resto de bikers presentes en la sala.

Track de la ruta